El Papa Benedicto XVI exhortó ayer a los cristianos a elegir la sobriedad como estilo de vida, especialmente en las fiestas de Navidad que están por llegar. […]
Con el tema de la sobriedad como pieza clave de su discurso, el Papa destacó la personalidad de san Juan Bautista, precursor de Jesús y ejemplo de sencillez. Su estilo debería llamar a todos los cristianos a «escoger la sobriedad como estilo de vida», afirmó.
San Juan Bautista viene presentado «como una figura muy ascética: vestido de piel de camello, come saltamontes y miel silvestre que encuentra en el desierto de Judea», explicó Benedicto XVI.
Jesús mismo –dijo–, una vez, «lo contrapuso con aquellos que están en los palacios de los reyes» y «que visten de trajes de lujo». […] «Es importante que volvamos a nosotros mismos y hagamos un examen sincero sobre nuestra vida».
Bonitas reflexiones sobre un personaje fascinante de la Biblia. Eso sí, al hilo de ellas le proponemos a Joseph Ratzinger que haga un examen sincero sobre su vida: por ejemplo, podría empezar por su calzado realizado a medida, tan amplio y variado que su importe es astronómico. Se puede continuar por el resto de su vestuario, cuyo lujo y costes han aumentado desde que él llegó al Vaticano. Los papas tienen también una planta del hospital Gemelli de Roma reservada para ellos. Su palacio de reyes tampoco es muy austero, que se diga… Por no hablar de los cientos de personas a su servicio. Etcétera. LEx