
La amenaza terrorista contra EEUU ha cambiado de cara desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 y ahora su principal enemigo es un "terrorista solitario", menos letal, pero más difícil de detectar, como el que intentó atentar en Nueva York el pasado sábado.
El ataque fallido con un coche bomba en Times Square, presuntamente obra de Faisal Shahzad, es el último de tres complots sin la complejidad de un gran atentado pero con gran poder para sembrar el terror en Estados Unidos, la finalidad última del terrorista.
En diciembre el nigeriano Umar Farouk Abdulmutallab trató de detonar explosivos que llevaba escondidos en su ropa interior en un vuelo desde Europa a Detroit, según la policía. El mes anterior el mayor Nidal Malik Hasan fue acusado de matar a 13 soldados en una base militar en Fort Hood (Texas).
En los tres casos los presuntos culpables fueron hombres que actuaron solos, aunque aparentemente contaban con vínculos con extremistas en el extranjero que les dieron apoyo ideológico o material. […]
Sin embargo, ese tipo de operaciones son "muy, muy complicadas", dijo Hoekstra en la cadena 'CBS'. Según la Casa Blanca, la presión estadounidense sobre Al Qaeda ha degradado su estructura de mando y le ha hecho optar por "ataques más reducidos, menos sofisticados", declaró en una rueda de prensa el portavoz presidencial, Robert Gibbs.
La ausencia de una trama amplia hace esas acciones más difíciles de frustrar por parte de la policía. Shahzad, por ejemplo, es un ciudadano estadounidense, nacido en Pakistán, y no estaba en ninguna lista de terroristas. Se trata del tipo de operativo perfecto para un grupo terrorista extranjero. […]
Aunque luego se “matizó” la cosa, parece evidente que paripés terroristas como éste de Times Square y el anterior en un avión con destino a Detroit se acompañan de la voluntad secreta pero cada vez más explicitada de convertir a cualquiera en sospechoso.
En efecto, si se da a entender que ahora basta una sola persona, o al menos sin una trama colectiva cercana, entonces cualquiera de nosotros puede ser el presunto culpable.
Y sobre la base de la seguridad contra el “terrorismo” implantarán leyes y medidas, ya lo están haciendo, para reprimir manifestaciones del estilo de las provocadas por los recortes sociales en Grecia y en España, así como cualquier disidencia. Todo en honor del dios Mercado y, sobre todo, del Superdiós PODER. LEx