sábado, noviembre 17, 2012

La religión en la escuela




El debate sobre el Anteproyecto de Ley orgánica de mejora de la Calidad  de la enseñanza y las propuestas que se están realizando en orden a una mejora en el preámbulo y en el desarrollo normativo, antes del trámite parlamentario, no ha llegado aún a una clave del concepto de calidad en la educación y del desarrollo integral de la persona: la enseñanza de la religión. El texto que han presentado los responsables del Ministerio que preside José Ignacio Wert, no contiene una modificación sustancial de la actual normativa sobre una asignatura que debe regularse por los Acuerdos entre la Iglesia y el Estado. De esta manera, la reforma del PP no cambia la injusta y precaria situación de la asignatura de Religión, heredada de los gobiernos socialistas.

Aparcar una modificación necesaria de la clase de religión a causa del posible conflicto ideológico que provocaría es someterse a la presión de grupos que nunca se darán por satisfechos. La nula voluntad del legislador de proponer una adecuada forma de enseñanza de la asignatura de la religión en la escuela sorprende sobremanera a los padres, que un año tras otro reclaman esta formación en ejercicio de sus derechos fundamentales. Que la asignatura de religión, obligatoria en su oferta para los centros y de libre elección por los padres, no tenga el rango de asignatura fundamental, es un síntoma del secuestro de la educación por una estrategia puramente política.

La asignatura de religión católica goza de un estatus privilegiado en el sistema educativo español: es de oferta obligatoria por parte de los centros, cuenta con una red de profesores nombrados a dedo por los obispos pero financiados por el estado, condiciona los horarios de todos los alumnos de cada nivel, incluidos aquellos que no la eligen… En tiempo de recortes brutales en el sistema educativo, éstos apenas han afectado a dicha asignatura. Aun así, todo esto les parece insuficiente. Y es que, por mucho que se les otorgue, siempre reclamarán más, y más y más, pues nunca renunciaron al estado confesional y  lo quieren todo. LEx



Musulmanes austriacos piden a Arabia Saudí que permita y financie la construcción de un templo cristiano




Una importante asociación musulmana austriaca ha pedido al régimen de Arabia Saudí que permita, e incluso financie, la construcción de una iglesia cristiana en territorio saudí para mostrar con hechos que Riad está a favor de la paz y la tolerancia entre las civilizaciones. La propuesta de la Iniciativa de los Musulmanes Liberales de Austria (IMLA) reclama un templo cristiano en Arabia Saudí «como gesto de reciprocidad por los muchos proyectos de construcción de mezquitas en países cristianos en los que está implicado el régimen de Riad». […]

Según el modelo radical suní wahabí, Arabia Saudí, patria de Mahoma, no puede autorizar ninguna religión en su suelo distinta del islam, pese a que son muchos centenares de miles los cristianos que trabajan en aquel país. La práctica de la religión está prohibida incluso en el interior de las embajadas, y la “policía religiosa” vela para que los cristianos no se junten en sus domicilios para rezar.

La invitación es muy positiva, pero es un grave error que esta asociación lo haga en nombre de la reciprocidad, y no de la libertad religiosa (ver ¿Reciprocidad o libertad religiosa?). LEx



El Premio Nobel de la Paz para aquellos que declararon la guerra a mi país



Kourosh Ziabari

El Premio Nobel de la Paz es el más prestigioso honor que se le puede otorgar a una persona en su vida. […] ¿Merecía realmente la Unión Europea recibir el Premio Nobel de la Paz?

Realmente no sé si esta unión contribuyó verdaderamente en las décadas pasadas a la fraternidad e integridad entre sus 27 miembros, pero de lo que he sido testigo personalmente el año pasado es de que esta unión ha declarado agresivamente una guerra total y sin derramamiento de sangre a Irán que afecta a millones de civiles inocentes de mi país los cuales no pueden entender por qué crimen se les está atacando y castigando de esta manera tan beligerante e injusta.

Desde el pasado 1 de julio la Unión Europea empezó a imponer a Irán un embargo inclusivo de petróleo a consecuencia de la presión tanto directa como a través de los lobbys de Estados Unidos y en una campaña cuyo objetivo era paralizar el programa nuclear de Irán, que según ellos no tiene fines civiles, y, finalmente, romper el soporte de la economía iraquí y obligar a este país a hacer concesiones políticas.

A consecuencia de estas sanciones […] el país se ha visto afectado por una sorprendente e insoportable hiperinflación que […] ha estado aumentando el precio de los artículos y de las materias primas en un 70% cada mes […] y la exportación de petróleo del país ha disminuido […], lo que significa una reducción de las ventas de un 50% . […]

A consecuencia del embargo de petróleo y de otras restricciones financieras que la UE ha impuesto a mi país, las familias iraníes no pueden pagar los estudios de sus hijos en el extranjero y, por consiguiente, gran cantidad de estudiantes iraníes en universidades extranjeras están volviendo en masa. Medicamentos y productos farmacéuticos especiales que se solían importar del extranjero ya no llegan a los mercados iraníes y miles de pacientes que necesitan desesperadamente medicamentos para enfermedades como talasemia, hepatitis, diabetes, diferentes tipos de cáncer, enfermedades del corazón y trastornos psiquiátricos se enfrentan a graves problemas para encontrar sus medicamentos. […]

Las guerras no se emprenden simplemente bombardeando ciudades o arrojando armas nucleares sobre otras naciones. Lo que la Unión Europea he estado haciendo con Irán es la representación inequívoca de una guerra total en la que las víctimas silenciosas son los ciudadanos ordinarios. […]

Es tan “prestigioso” el premiucho este que, para redondear la faena, el “Comité Noruego” haría bien otorgándoselo a sí mismo. A fe que lo merece...

En cuanto a la concesión del susodicho galardón a la UE, lo de Irán (ver este dossier) es solo uno de los múltiples “méritos” que lo justifican. LEx