Florentino Portero, analista del Grupo de Estudios Estratégicos GEES
ABC, 30.8.07
Poco a poco Irán va logrando sus objetivos. Tras la guerra privada entre Hizboláh e Israel, que puso en evidencia la extrema debilidad de las instituciones libanesas, ha llegado el conflicto civil entre nacionalistas e islamistas en Palestina, con el resultado de todos conocido. En ambos casos el objetivo era el mismo: impedir los procesos de democratización en marcha y cualquier entendimiento con las potencias occidentales e Israel. […]
Sonará duro decirlo, pero es preciso denunciar que éstos del GEES (oscuro ‘think tank’ al servicio del Imperio) mienten más que hablan. Hasta Olmert, el primer ministro del estado sionista, reconoció en su día ante la Comisión Winograd que la invasión del Líbano en 2006 la había decidido varios meses antes de iniciarse (testimonio que refuta de raíz que fuera Irán, a través de Hezbolá, quien orquestó esa guerra). Además, recordemos que es Occidente con su marioneta Mahmud Abás (también conocido como Abú Mazén), presidente palestino, quien está violando la democracia palestina al marginar al partido (Hamás) que, nos guste o no, ganó las elecciones por mayoría absoluta del voto de su pueblo. LEx
En Líbano la situación es tensa. Tras la guerra de Hizboláh e Israel, Irán y Siria han movido pieza con Fatah al-Islam, un grupo terrorista vinculado a al-Qaeda y utilizado tácticamente para evidenciar la debilidad del gobierno. […]
Rastreramente absurdo: ¿Qué ganaría Irán, un país amenazado de invasión por los ejércitos más poderosos de la tierra, con todo eso? Su propio régimen ha denunciado, con buena lógica, que Al Qaeda es un instrumento estadounidense. LEx
Para Olmert, como para muchos analistas israelíes, Siria es un aliado coyuntural de Irán. El gobierno de Damasco es baasista, mientras que el de Teherán es islamista. Si en Siria se ha perseguido con extrema crueldad tanto a los Hermanos Musulmanes como a al-Qaeda, en Irán se han alentado movimientos de este tipo, aunque aún más los chiítas de corte fundamentalista.
Repugnante patraña, no sólo por lo que acabamos de decir, sino porque es público y notorio que el régimen iraní detuvo desde el principio (al poco del 11-S) a miembros de Al Qaeda y los entregó a sus verdaderos jefes (i.e., a los gobernantes de Estados Unidos). LEx
Siria apoya a Hizboláh para desestabilizar al régimen político libanés y justificar la vuelta de sus tropas, pero al final unos y otros, nacionalistas sirios e islamistas libaneses, están condenados a enfrentarse.
Claro, en la medida en que gente como vosotros no paráis de estimular ese choque. LEx
Lo que subyace en la oferta de Olmert es la idea de que el modelo cristiano-sunita de gobierno para el Líbano ya no es viable y que la anexión a Siria tras un segundo protectorado puede resultar un mal menor. […]
Todo puramente (pseudo)delirante y falsario (y con el único fin de promover la agresión a Siria tanto como a Irán): hace sólo un año que el gobierno israelí hizo la guerra a Hezbolá (que tenía a Siria supuestamente detrás), masacrando el Líbano, y previamente había logrado que el gobierno estadounidense intimidase a los sirios lo bastante como para que sus tropas se marcharan al fin. ¿Y ahora Olmert va a estar dispuesto a que vuelvan? LEx
La idea de recurrir a estados vecinos para acabar con milicias islamistas apoyadas por Irán también ha surgido en relación con la cuestión palestina.
El 23 de mayo pasado Netanyahu, máximo dirigente del Likud y probable Primer Ministro israelí antes de Navidad, planteaba desde las páginas del Financial Times el futuro del pueblo palestino en el marco de una federación o confederación con Jordania. Hacía años que los dirigentes israelíes no hablaban públicamente de Jordania como la solución del problema palestino.
Netanyahu partía de la idea de que la Autoridad Palestina era incapaz de imponer su autoridad en una sociedad partida en dos. […]
…en una sociedad que el estado sionista, con la complicidad de Occidente, ha partido en dos. LEx
Tanto la maniobra de apertura a Siria de Olmert como la propuesta de confederación jordano-palestina de Netanyahu tienen en común algo que los dirigentes israelíes comparten con sus iguales en Egipto, Jordania o Arabia Saudita: que la principal amenaza para la estabilidad de la región es el régimen iraní. […]
La desestabilización de Jordania y de Egipto son los siguientes objetivos.
¿Para qué, Florentino? ¿Para suministrar nuevas excusas (a añadir a las muchas otras que ya os habéis inventado) que a vuestro querido Imperio le faciliten el camino a la guerra tan anhelada por todos vosotros? LEx
Volver a hablar de proceso de paz ya no es sólo anacrónico, resulta patético. […]
He aquí un claro llamamiento bélico de este partidario del genocidio. LEx
Unos y otros son responsables del callejón sin salida al que han llevado a su pueblo, una situación de la que se ha podido aprovechar
Irán, un país dotado de una estrategia coherente que, paso a paso, va logrando sus objetivos ante la inacción de unos y otros.
Sentís que tenéis las espaldas bien cubiertas, ¿verdad? El Imperio, vuestra verdadera patria, anima vuestros pasos y eso os permite una arrogancia extrema, convencida de su impunidad. Pero es consolador recordar que un día tendréis (tendrás, Florentino) que rendir cuentas ante Dios (ver Santiago 2: 12). Más valdría que rectificases antes de que sea demasiado tarde, «porque juicio sin misericordia se hará con el que no tiene misericordia» (vers. 13). LEx